Una duda frecuente entre quienes han comprado o tienen pensado comprar un vehículo eléctrico o híbrido enchufable es qué tipo de cargador elegir para su vehículo. Al margen de las diferentes soluciones existentes para la recarga en la vía pública (recarga ocasional), y si has decidido instalarte tu propio punto de recarga para el día a día en casa o tu trabajo, seguro te interesa conocer cuál es la opción más adecuada para tu vehículo y circunstancias.
Qué tipo de cargador elegir para un vehículo eléctrico
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Tipo de conector, clave para elegir cargador para vehículos eléctricos
Actualmente aún no hay un formato universal de enchufe o cargador para vehículos eléctricos. Y tampoco está del todo claro qué tecnología se va a imponer. Aunque todo apunta a que el conocido CCS combo terminará siendo el estandar utilizado por todos, de momento siguen saliendo vehículos al mercado con otros tipos de conector, como Mennekes, Chademo, etc.
Conocer qué tipo de enchufe necesita tu vehículo es esencial para elegir el cargador adecuado para recargar su batería. Dado que existen diferentes modelos, este es un punto clave a tener en cuenta. -
Tipo de carga
En el sistema eléctrico actual disponemos de dos tipos de instalación posible, trifásica y monofásica. Podemos consultar en la factura de la luz si disponemos de instalación monofásica o trifásica contratada. Según el tipo elegido variarán factores como el tiempo de carga (en trifásica normalmente la carga podrá realizarse más rápida) o el precio de la factura.
Además de este dato debemos conocer si nuestro coche es capaz de cargar en trifásico, ya que no todos los modelos los hacen. En el caso de que nuestro coche lo permita podemos conectarlo a un cargador que realice la carga en trifásico siempre y cuando la instalación eléctrica como hemos hablado sea del mismo modo la adecuada. -
Autonomía del coche y velocidad de carga
Una vez resueltos los puntos anteriores, toca valorar la potencia y el amperaje de la instalación que se va a realizar, todo depende del número de kilómetros semanales que hagamos y la autonomía del coche. Estos factores será trascendentales para elegir un tipo de instalación y de cargador u otro.
Cabe mencionar que según la instalación que valoremos realizar puede ser:
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Recarga convencional, modo 2 o carga lenta
Se conoce por cualquiera de estos tres nombres.
Es el tipo de cargador que utiliza la misma intensidad y voltaje que una instalación eléctrica doméstica. Es decir, es el cargador para vehículo eléctrico que puedes utilizar en tu casa, por ejemplo.
La carga está limitada a 2,3kW de potencia. Se denomina de carga lenta porque un vehículo promedio tarda entre 6 y 12 horas en cargar su batería por completo. Es por ello que es ideal para el hogar, donde el vehículo puede recargarse perfectamente en las horas nocturnas. También para parkings de empresas, en el que durante un turno completo de trabajo puedes recargar tu vehículo.
Además no hay que perder de vista una gran ventaja: no tiene coste de instalación. Esto unido a su bajo precio de compra y su facilidad para utilizarlo en casa hace que sea el tipo de cargador más popular. -
Carga semirrápida o carga en modo 3
Los cargadores de carga 3 o semirrápidos pueden cargar completo, de media, un vehículo eléctrico en 4 horas. Para ello utilizan hasta 32 A y una potencia aproximada de hasta 7,3kW.
Este tipo de cargador para vehículos eléctricos precisa de una toma de tierra anclada al suelo. Esta se denomina wall box o caja mural. Y consta de varios conectores que garantizan la seguridad así como la carga eficiente, evitando el riesgo de descarga.
Para acelerar la carga se utiliza una carga trifásica, es decir, tres conectores. -
Recarga rápida, ultrarrápida o carga 4
Es el tipo de cargador que permite cargar un vehículo eléctrico en menos tiempo. Y lo consigue gracias a que alcanza hasta hasta 350 kW de potencia. Esto implica que pueda cargar hasta el 80% de la batería de un vehículo en un cuarto de hora. ¡Sí, en aproximadamente 15 minutos! (dependiendo de la capacidad de batería de tu vehículo).
Obviamente esta gran ventaja tiene un coste. Al plantearte qué tipo de cargador elegir para tu vehículo eléctrico ten en cuenta que este tiene un precio más elevado. De hecho puede costar tanto como un coche, según los modelos. Además, debes tener en cuenta que este tipo de cargador va conectado a torres de alta tensión. Y la acometida hasta una de ellas también tiene un coste añadido.
Por ello es más aconsejable para una electrolinera que para uso doméstico. También para empresas con flotas de vehículos eléctricos que se podrán cargar rápidamente para seguir operando.
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¿Recapitulamos? Para decidir qué tipo de cargador elegir para tu vehículo eléctrico debes valorar los siguientes puntos clave:
- El tipo de conector apto para cargar tu vehículo.
- La potencia máxima que puedes proporcionar al cargador.
- Tus necesidades y la velocidad de carga que deseas.
- Tu presupuesto para la compra de un cargador.